En solo un año MUTIMA se ha consolidado como el centro de referencia de atención psicosocial en Congo. Los resultados extraordinarios han hecho que cada vez haya más y más personas que piden ayuda para ser atendidos.
La visión a 3 años es implantar un MUTIMA en las zonas de mayor emergencia y seguir formando psicólogos y otros especialistas, evitando desplazamientos a pie durante kilómetros. El deseo por ser atendidos, hace que estos congoleños se jueguen la vida en el recorrido al Centro.
La misión es colaborar con el pueblo congoleño, aportando y formando, dando herramientas para conseguir personas saludables mentalmente, dignas y sabedoras de que el trauma puede ser superado. Esta es la base para que los ciudadanos de la República Democrática del Congo sumen esfuerzos en la reconstrucción de un país donde la riqueza no resida sólo en diamante, oro y coltán, La mayor riqueza de un pueblo es la justicia, la igualdad, la dignidad y, por encima de todo, el derecho a la vida, la salud física y mental, la dignidad y la seguridad.
MUTIMA en la actualidad necesita 30.000,00€ anuales, incluyendo gastos de infraestructura, equipamiento, sueldo de profesionales especializados y gastos inherentes y necesarios para la actividad primaria.
En este momento hay que trabajar para que el actual MUTIMA siga abriendo cada día sus puertas a la vida, por la salud mental, por la dignidad y la seguridad, trabajando con metodología innovadora y poniendo a disposición de los congoleños las técnicas más actuales para abordar el trauma.
También apostar por la creación de más MUTIMAs, porque el actual en Kivu ha demostrado ser de gran capacidad de atención, pero insuficiente dada la emergencia del país y esta zona en particular.
Cada centro MUTIMA precisa de una inversión inicial de 70.000,00€ que sirven para la construcción de instalaciones, equipamientos, selección y formación de psicólogos y graduados sociales y 30.000,00€ destinados a su mantenimiento.
Esto es una apuesta segura por la salud mental y la vida. Las acciones de muchos, el corazón de muchos, la consciencia de muchos, hace posible curar y superar la escalofriante situación en Congo.
Nos nutrimos de África. Sus materias primas. África es el futuro de este planeta. Para que África pueda compartir todo lo que posee y los países ricos nutrirse de sus recursos, es necesario apostar por la salud mental, la vida de quienes hacen cada casa, cada aldea, cada ciudad, cada país. Hay posibilidades de ser agentes de cambio. De abrir posibilidades y recursos a un pueblo denostado.
El amor cura. La salud mental, la justicia y la formación son bases sólidas para un pueblo que cada día se debate entre la vida y la muerte, porque muerte también es el trauma no superado que invalida a quienes lo sufren, consecuencia de las garras de la violencia. MUTIMA es VIDA. Un templo con corazón que acoge y cura, que sana y forma, que se atreve a levantarse con la esperanza que cada día podrán dar vida a otros.
Apoyar MUTIMA es hacer posible el mantenimiento y creación de más MUTIMAs y no es sólo generosidad. Es un acto de responsabilidad personal y social. Una demostración de mano tendida a un pueblo sometido y dolido de muerte. Un pueblo que en sus personas nos da la oportunidad de ser auténticos motores de cambio, de elegir vida en lugar de muerte.
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